miércoles, 3 de septiembre de 2014

La venganza será inservible

A poco menos de dos meses de final del Mundial, Argentina y Alemania volvieron a verse las caras  en Dusseldorf. En el debut del Tata Martino, se consiguió una victoria más que merecida por 4 a 2. Si bien este triunfo no nos devuelve la Copa del Mundo, nos sirve al menos como consuelo tras la final perdida en el Maracaná.
En Düsseldorf, la Albicelste le ganó 4-2 a la vigente campeona del mundo con goles del Kun Agüero, Erik Lamela, Federico Fernández y Ángel Di María, la gran figura del amistoso (junto a Lamela, de gran rendimiento en el primer tiempo). Descontaron para los teutones, Schürrle, con complicidad de Romero, y Fernández en contra. 


Luego de la salida inesperada de Sabella, el Tata Martino había optado por convocar los mismos 23 que estuvieron en el Mundial (como premio por haber llegado a la final). El ex DT del Barcelona y Newells, tuvo poco tiempo para trabajar pero así y todo en varios pasajes del partido al equipo se le vio su impronta.


No solo tuvo mayor agresividad en ataque el equipo sino que también sumó mayor cantidad de jugadores a la hora de buscar el arco contrario. ¿La defensa? Si bien trato de salir jugando, tal como le gusta al flamante seleccionador, volvió a demostrar algunas falencias tal como se le cuestionaban antes del Mundial. 


Fue un partido golpe por golpe (con muchas situaciones de gol) donde Argentina fue la más efectiva de las dos selecciones (así como dije que Romero se comió un gol, también hay que decir que sacó varias "bochas" de gol, como se dice en la jerga). Ah, así como Argentina no tuvo a Lionel Messi, quien se quedó en Barcelona por lesión, y a Gonzalo Higuaín, quien no entró por molestias; a su vez, los locales solo contaron con 4 titulares de aquella fatídica final (Manuel Neuer, Benedikt Höwedes, Christoph Kramer y Toni Kroos). 

No hay comentarios:

Publicar un comentario