No subió ni al podio

A Holanda le alcanzó con un buen primer tiempo para superar por 3 a 0 a Brasil y subirse al podio. Los de Van Gaal se encontraron con un un penal a los 4 minutos y se le facilitaron las cosas. En la segunda mitad, Brasil fue con más amor propio que fútbol en busca del descuento que jamás llego porque la naranja se cerró bien atrás, supo aguantar las embestidas y liquidarlo de contra.
El arbitro Djamel Haimoudi, se equivocó fiero al darle un penal a Holanda siendo que Thiago Silva le había hecho falta a Robben afuera del área. Aunque ojo, también se podría decir que la jugada merecía la tarjeta roja por ser el último hombre, aunque al final tan sólo vio la tarjeta amarilla. Minutos después, los de Scolari quedaron mal parados, como tantas otras veces lo hicieron a lo largo de este Mundial, y David Luiz se la dejó servidita a Daley Blind para que marque de derecha el 2-0.

Brasil sintió el golpe como contra Alemania y si bien no sufrió una goleada tal, jamás pudo hacer pie en el partido y lejos estuvo del descuento. Terminó atacando de manera muy liviana y nunca mostró esa rebeldía necesaria para llevar peligrosidad al arco rival. 



Holanda supo cerrarse en su propio campo y a base de contragolpes, amplió el marcador. En tiempo cumplido, llegó una gran maniobra de Robben, un muy buen centro atrás de Janmaat y una precisa definición de Georginio Wijnaldum para sellar el 3-0 definitivo. De esta manera, Holanda quedó en tercer lugar y Brasil en el cuarto.